Le hice este vestidito a Giuseppina de una camisa de mi esposo. Cuando mi esposo decidió que ya no iba a usar esta camisa, inmediatamente le vi todo el potencial: reciclarla en algo para mi Giuseppina. El color rosado y los cuadros me encantaban, pero no tenía una idea muy clara. Lo primero que pensé fue en una falda pero de pronto me senté a diseñar el modelo y lo vi claramente... tenía que ser un vestido camisero.
Con la idea en mente me puse manos a la obra. Primero sacar la altura de la falda desde el bajo de la camisa. Quería que se mantengan los botones utilizables así que le puse un elástico con la camisa abierta. Luego cortamos el cuerpo y cosemos los costados. Con la camisa abierta pegamos el cuerpo a la falda. Luego cosemos hombros. Finalmente nos queda cerrar las sisas y el cuello con un sesgo de tal manera que quede pulido el acabado.
Hay muchas cosas que se pueden hacer con una camisa grande: una falda para niña más grande, una blusa sin mangas para nosotras, un overall para niño pequeño, la lista es larga, sólo hace falta atreverse y experimentar. Lo bonito es toda la creatividad que se pone en marcha y el desarrollo de nuestras habilidades e ingenio.