Hace tiempo muchas amigas me piden que les enseñe a coser. He encontrado mucha apertura y entusiasmo por aprender a usar la máquina de coser. Entre ellas estaba mi prima Gabriela, que en una linda iniciativa me lo propuso con proyecto en mano. Mi respuesta fue sí inmediatamente!
Éste fue el vestido que hicimos. Mi prima tejió a crochet el cuello y luego hicimos un patrón sencillo en base al cual haríamos el vestido en sí.
Tiene un pequeño encarrujado en el canesú y un volante también pequeño en la basta. Es super fresco y cómodo para libertad de movimientos.
Nos tomó sólo una tarde hacerlo, fue muy divertido y creativo. Me encanta cuando la creatividad fluye.
Nuestras hijas tuvieron oportunidad de jugar por horas, estaban tan entretenidas y concentradas en el juego que al final no se querían separar.
Cuando Michelle vió el resultado dijo: "Oh, qué hermoso"
Aquí está ella en su fiesta feliz con su vestido.
